¿Sabes lo que es el selfcare?

Esta palabra anglosajona está de moda, pero la esencia de esta tendencia es simplemente cuidarse a si mismo, y a mi me encanta.

Fácil, ¿no? Pues como imagino que ya sabes, no, no es tan fácil. Si te pareces en algo a mi, seguramente cuando dedicas un poco de tiempo a ti misma- en vez de trabajar un rato más, o jugar con los niños, o salir a cenar por compromiso- te sientes egoísta y super culpable. 

No somos únicos. Por algo en los aviones te dicen que, en caso de despresurización de la cabina, te pongas tu la máscara de oxígeno antes de intentar ayudar a otros. Quizás es condición humana lo de ayudar a otros antes que a nosotros mismos, pero parece ser que es necesario.

Reconozco que a mi me ha costado encontrar esos momentos de auto cuidado. No solo por ser madre de dos niños pequeños, si no porque desde siempre he sido cuidadora. Cuando en el trabajo o en mi vecindario alguien necesita ayuda, yo soy la que me ofrezco voluntaria. Cuando alguien está enfermo, pregunto si puedo ayudar de alguna manera. Es una cualidad bonita y que valoro tanto en mi como en otras personas, pero para poder ayudar a otros hay que estar bien.

Aquí es donde entra el  selfcare. Vamos que empieces a tratarte con el mismo mimo y cariño con los que tratas a los tuyos. No por vanidad ni por egoísmo, sino por pura supervivencia. Si no te cuidas tu, ¿quién te va a cuidar? ¿quién va a cuidar a los que te necesitan?

Aún me falta bastante para ser experta en esto, pero mis comienzos prometen, y creo que pueden ayudarte a encontrar momentos personales que van a repercutir favorablemente en el resto de tu día. Así es como yo practico el selfcare en mi día a día. 

Por la mañana: Mi idea era hacer 15 minutos de yoga todas las mañana, pero la realidad es que con niños pequeños las mañanas son tempranas y algo caóticas. En vez de hacer yoga, dedico 15 minutos para leer el periódico, sentada, y mientras disfruto mi café. Moraleja- busca algo que te sirva a ti como energizarte para el resto del día. 

Ejercicio: Me gusta correr y hacer yoga, e intento hacer ambas cosas un par de veces por semana. Al principio siempre encontraba alguna excusa para no hacerlo- los niños están llorando, tengo que limpiar la cocina, tengo trabajo atrasado...pero ya no. No solo soy mejor madre, y persona en general, cuando hago ejercicio, si no que los días que hago más ejercicio son los días que más energía tengo.  

Lectura: Me encanta leer, así que leo durante el día todo lo que puedo. A veces es un capítulo de un libro, y otras los primeros párrafos de un artículo, pero si veo que tengo solo 10 minutos intento apartar el movil y dedicar ese momento a algo que realmente me gusta. Algo que me ayuda a conseguir esto, es llevar un libro conmigo a todas partes. 

Rutina de noche: Ahora que estoy muy muy cerca de los 40, lavarme la cara por la noche es absolutamente imprescindible. Intento cada noche irme a la cama lo suficientemente temprano para tener tiempo de lavar mi cara y cuello, y extender serum de ácido hialurónico y mi aceite de árgan favorito por todo mi rostro. Son unos minutos nada más, pero es un momento de soledad, de verme en el espejo, sentir mi piel y cuidarla con cariño. Me voy a la cama relajada y satisfecha.

Una buena película: Hace varios años decidí dejar de lado la televisión sin más, y apuntarme a la televisión a demanda. Esta decisión la hice para dejar de ver cosas simplemente porque las estaban dando, y centrarme en películas, series y documentales que de verdad me apetecían ver y me aportaban, por lo menos, entretenimiento. Desde que hice esto veo menos horas de 'televisión' y lo que veo, me agrada y me entretiene. 

¿Cómo te cuidas tu? 

-Olivia