Parece que cuidarse y cuidar el medio ambiente es sólo para ricos o por lo menos acomodados. La mayoría de las marcas de ropa sostenible son bastante prohibitivas, la comida ecológica es cara y no hablemos de muchas de las mejores marcas de cosmética natural.
Sin dejar de lado la realidad del coste de la sostenibilidad, hoy vengo a contarte que hay formas de vivir con más salud y cuidando además el medio ambiente sin vaciar tu bolsillo. No solo eso, si no que es posible hacerlo gastando incluso menos que si viviésemos de forma convencional.
1- Vuelve a la costumbre de reutilizar: No solo en las tarteras y las botellas de agua, también en las servilletas y los trapos. En mi casa no compro servilletas de papel, rollos de cocina, bolsitas ni film de plástico desde hace años y aquí nadie los hecha de menos. Tengo servilletas de diario (porque con niños acaban hechas polvo) y tengo servilletas para visitas o días más especiales. Todas se lavan juntas cuando tengo suficientes para llenar la lavadora. Para lavar usamos balletas y esponjas reutilizables y trapos que, en vidas anteriores, eran camisetas de algodón. En vez de bolsas de plástico uso bolsas de tela que reutilizo una y otra vez desde hace años, y el film de plástico se puede sustituir por "tuppers" de cristal, tela encerada o simplemente poniendo un plato llano sobre un cuenco como se hacía antes.
2- Meriendas y postres caseros: A parte de que las meriendas y postres envasados suelen ser ultra procesados, cuando hechas cuentas son realmente bastante caros para el bolsillo, sobre todo cuando hablamos de productos sin gluten y - con todos los envoltorios- para el medio ambiente. Ten a mano una buena receta de bizcocho y otra de galletas para poder tirar de ellos cuando lo necesites. Puedes hacer en cantidad, y congelarlos individualmente para sacar de uno en uno.
3- Cosmética la necesaria: Me atrevo a decir que la gran mayoría de personas tienen botes y frascos de cosmética a medio usar que están o estarán pronto caducados. Invierte en productos y marcas de calidad aunque sean caras, pero compra sólo lo que vayas a usar hasta el final. Reducirás tu gasto económico, además de el uso innecesario de envases.
4- Alimentos buenos, bonitos y baratos: Me encantan los superalimentos para momentos puntuales, pero son super caros y no mejores que la legumbre de toda la vida. Te hemos dicho ya que las incluyas para añadir fibra a tu dieta, y ahora te digo que lo hagas también para ahorrarte dinero, sobre todo cuando las compras a granel y las haces en casa. Hay muchas formas de comer legumbre, y no tiene que ser siempre con cuchara, prueba a hacer tacos de garbanzos o ensaladas con judía blanca.
5- Prevenir mejor que tratar: Desde cuidarse bien la dentadura (limpieza y revisión cada 6 meses), pasando por beber la cantidad de agua que necesitamos, tomar una dieta equilibrada y gestionar enfermedades crónicas. Prevenir dolencias médicas y problemas estéticos es siempre mejor y más barato que tratarlos. Añade a tu agenda tiempo para moverte, citas con tu dentista y médico, y acuérdate de que hoy es el mejor día para mejorar tu salud.
Me gustaría saber como tú manejas el tema del dinero, la salud y el medio ambiente. Déjame tus ideas abajo y así aprendemos todos un poco más.