Cómo nos gustan los postres ricos, y este es además natural y, aunque lleve chocolate, bastante saludable, ya que no sólo es un postre con base de fruta, sino que además tiene los antioxidantes del chocolate negro y las grasas buenas del aceite de coco. 

Prepararlo te llevará menos de 10 minutos y el resultado es espectacular, tanto para comerlo solo, como para presentarlo después de una cena en casa. 

Para 2-4 personas

Tiempo de preparación: 15 min

Dificultad: ninguna

Notas: Paleo. Sin gluten. Sin lactosa.

Ingredientes:

500 gramos de Fresas
225 gramos de chocolate negro picado (preferiblemente de más de 70% de cacao)
2 cucharaditas de aceite de coco

Preparación:

Lava y seca las fresas con cuidado, dejando el rabito y hojas intactas. Resérvalas. 

Prepara una bandeja de metal, forrándola con papel de cera, o con una alfombrilla de horneado de silicona. Métela en la nevera o el congelador.

En un bol de cristal resistente al calor, sobre un cazo pequeño con agua a fuego lento derrite juntos el aceite de coco y el chocolate, removiendo constantemente hasta que quede completamente derretido. 

Baña cada fresa, a mi me gusta que un cuarto de la fresa quede descubierta,  y colócala en la bandeja fría que habías preparado, de manera que el chocolate se enfríe más rápidamente.

Trabaja rápido pero cuidadosamente, y deja que se enfríen en la nevera si hace calor, el chocolate se endurecerá, hasta que sea la hora de servir.

Si lo prefieres, puedes servir el chocolate en pequeños cuencos individuales, para mojar las fresas a modo de fondue.