Los pasos de una rutina de salud y belleza

Cuidar la piel de nuestra cara es un paso importante que debemos hacer por lo menos todas las noches.

En el mercado hay muchísimos productos de belleza para el cuidad de la piel, lo que por una parte es maravilloso, porque podemos elegir exactamente lo que mejor le viene a nuestra piel, pero por otra, determinar la rutina que mejor nos viene puede resultar complicado. 

En Salud Mediterránea nos gustan la rutinas de belleza sencillas, sobre todo las que hacemos día a día. Porque aunque a todos nos gusta y merecemos tener un momento para cuidarnos, la realidad es que las últimas horas del día suelen ser un alboroto, y estamos tan agotados que ese momento son realmente unos minutos robados. 

La rutina más sencilla

La rutina de belleza más sencilla debería de tener tres pasos: Limpieza, Tonificación e Hidratación. 

Limpieza: Se pueden hacer limpiezas de varias maneras y con diferentes productos. El agua micelar es muy rápido de usar puesto que no necesita ser aclarado y está bien para todo tipo de pieles, los exfoliantes se usan una o dos veces al día, limpiezas con aceite son ideales para personas con pieles sensibles, y los geles y limpiadores en crema para personas con piel normal o seca. 

La limpieza debería de hacerse al menos todas las noches. Al limpiar la piel por la noche eliminas maquillaje, si llevas, además de polución, sudor y suciedad que se acumula en la piel. Si te lavas la cara bien por la noche no es tan necesario que la laves por la mañana, pero puedes utilizar un limpiador ligero, sobre todo si sudas. 

Consejo 1: cambia la funda de la almohada a menudo para que esta no se la fuente de suciedad en tu piel. 

Consejo 2: encuentra un momento para hacer tu rutina de belleza que no sea justo antes de meterte en la cama. Por ejemplo, cuando acuestes a los niños, antes de hacerte una infusión, o si lees o ves la televisión por la noche, antes de sentarte a hacerlo. De esta manera evitas estar demasiado cansado para lavarte la cara. 

Nuestros limpiadores favoritos:

Tonificación: Tonificar la piel de la cara después de limpiarla es tu oportunidad de nutrirla con ingredientes específicos: ácido hialurónico, vitamina C, o agua de rosas. Puedes utilizar un paño de algodón limpio, una espátula gua-sha o las yemas de tus dedos- siempre limpias. 

Consejo 1: Si utilizas tónicos con agentes exfoliantes, úsalos solo por la noche, para no exponer tu piel más sensible al sol. 

Nuestros tónicos favoritos:

Hidratación: Tanto la textura del hidratante como los ingredientes de esta son importantes para encontrar la que mejor te va. Para pieles grasas, los geles acuosos van muy bien, para pieles normales y secas, lociones y cremas respectivamente, y para las pieles sensibles los bálsamos suelen ser los más apropiados. 

Para hidratar también se pueden utilizar aceites- mejor si se utilizan por la noche- como el de rosa moqueta o argán, que dan un extra de hidratación a pieles maduras. 

Consejo 1: Puedes utilizar tu hidratante normal en el contorno de ojos, pero para personas que tengan esa zona de la piel muy sensible, los productos específicos suelen dar menos reacción. 

Nuestros hidratantes favoritos

¿Tienes más tiempo?

Si tienes más tiempo puedes añadir a tu rutina de belleza sérums y mascarillas. Por norma general los productos deben aplicarse por texturas empezando por el producto más ligero, y acabando por el producto más grueso. Por ejemplo:

Agua micelar >Tónico de rosa > Sérum de Ácido Hialurónico > Locíon fluída

Las mascarillas pueden usarse una o dos veces por semana. Por ejemplo, una noche a la semana puedes hacer una mascarilla hidratante, en vez de utilizar tu crema de noche, y otro día puedes usar una mascarilla limpiadora de arcilla después de limpiar tu piel suavemente, y antes de hacer el resto de tu rutina: tónico, hidratante. 

¿Necesito una crema de noche y otra de día?

No necesariamente, pero las cremas de día suelen tener ingredientes antioxidantes entre otros para proteger a la piel del sol, polución y suciedad, mientras que las cremas de noche suelen ser más gruesas y tienden a ser algo más hidratantes. 

¿Y el filtro solar?

El filtro solar se aplicaría después de la rutina de belleza de día, es decir, después de la loción o crema hidratante. 

Nuestros solares favoritos:

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