¿Te apuntas a la henna?
Hay muchas razones por las que considerar teñirse el pelo con henna en vez de con coloraciones tradicionales.
Por un lado es 100% natural, no es tóxica, es compatible con tratamientos farmacológicos como la quimioterapia, y la cantidad de minerales que contiene la henna nutren y fortalecen tu cabello. Además, la henna cubre las canas, dando al pelo un bonito color y brillo. Las canas cogen un color de pelo diferente al del resto del pelo, por lo que parece que el pelo tiene mechas muy naturales. Recuerda que al igual que otros tintes, en cuanto va creciendo el pelo vuelve a verse la cana, aunque al ser la henna un tinte semipermanente la línea de demarcación queda algo más disimulada.
Cada vez más peluquerías se apuntan a dar hennas, barros y otros tintes naturales, pero la henna se puede hacer en casa. Te contamos cómo dártela para que te quede fenomenal y para que vayas eligiendo, aquí tienes nuestra oferta de hennas.
1- Utiliza guantes, un peine y un pincel de peluquería para separar bien y cubrir cada mechón del cabello fácilmente. Siempre utiliza utensilios de cristal, madera o porcelana y nunca de metal, ya que estos pueden hacer que la henna reaccione negativamente. Si prefieres, utiliza tus dedos, pero hazlo con guantes para no mancharlos, ya que la mancha de henna puede durar varias horas.
2- Unta crema hidratante por toda la piel del borde de la línea de raíz del pelo donde acaba la piel de la cara y empieza el pelo. Esto hará que aunque te salgas al poner la henna en la raíz, no manches tu frente de manera duradera. Ten cuidado de no poner la hidratante en el pelo para que ahí si te coja bien.
3- Elabora la mezcla con líquido caliente pero que no queme tu cuero cabelludo, y pensando en tus necesidades personales. Hacerla con café o té negro ayuda a cubrir canas, la manzanilla aumenta los tonos rubios y los tés rojos como el rooibos aumenta los colores rojizos.
4- Añade un chorrito de aceite de jojoba a la mezcla de henna y agua (o café o té) para hidratar y suavizar tu pelo mientras lo tiñes.
5- Empieza a cubrir el pelo con henna siempre por la línea del pelo, donde las raices y/o canas más se notan, partiendo con el peine por diferentes zonas, especialmente por las zonas donde normalmente te hagas la ralla. Luego cubre el resto del cabello por mechones.
6- Con la henna ya por todo el pelo, recógete el cabello sencillamente, sin gomas, y cúbrelo con un gorro de ducha. Puedes utilizar un secador de pelo para calentar la henna y hacer que actúe más rápido, pero sigue las instrucciones de la marca de henna que estés utilizando para determinar el tiempo de actuación.
7- Después de aclararte la henna no te laves el pelo, ponte acondicionador para nutrir e hidratar el cabello pelo y vuelve a aclararlo. En la medida de lo que puedas, déjate el pelo sin lavar 24 horas, puesto que aunque hayas aclarado el pelo la henna esta seguirá actuando en tu pelo.
8- Si tienes muchas canas puedes volver a hacerte la henna solo en la parte de las raíces más a menudo que el resto del pelo, que resulta algo más rápido. Por ejemplo, hacer las raíces cada 3 semanas, y todo el pelo cada 6-9 semanas.
Recuerda que aunque la henna es natural, al tener una cantidad de minerales importante, puede reaccionar negativamente con químicos de peluquería y dar a tu pelo un color que no quieres, normalmente tonos veres o morados... Si tienes el pelo teñido o con mechas, deja pasar dos o tres semanas antes de hacerte un prueba en un mechón de la parte de dentro del pelo para ver cómo reacciona tu pelo. Por el contrario si llevas tiempo dándote la henna y quieres pasar al tinte o las mechas, pide que te hagan una prueba en un mechón de dentro antes de hacerte el tratamiento por toda la cabeza.
